Actualizado el 22 de Julio del 2017 (Publicado el 14 de Enero del 2017)
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Creado hace 15a (22/07/2009)
Este texto fue publicado en Diario Frontera
Spam: esa lata digital
Dado su creciente uso, el correo electrónico se ha convertido en una vía publicitaria
muy tentadora. Tanto es así, que hoy día una epidemia digital se expande por los
buzones personales con mensajes no deseados, también llamados spam, a través de los
cuales se ofrecen servicios y productos no solicitados, la mayoría relacionada con
ofertas turísticas, pornográficas y de medicamentos.
Una compleja estructura de desarrolladores de software se dedica a detectar y crear
grandes listas de direcciones electrónicas, vendiéndolas luego a distintas empresas
publicitarias. Uno de los mecanismos más efectivos para recolectar las direcciones
electrónicas son los llamados mensajes en cadena, los cuales terminan convenciendo al
usuario a reenviar el correo a un grupo numeroso de personas, lo que garantiza
rápidamente la expansión de listas con direcciones electrónicas.
Se estima que más de la mitad del correo electrónico que circula en Internet es correo no
deseado, lo que nos hace imaginar una autopista llena de volantes publicitarios que
insisten en convencernos, metiéndose hasta por las ventanas de nuestros cuartos.
Las personas que se dedican a desarrollar mecanismos para enviar spam a la mayor
cantidad de correos electrónicos en el mundo, mejor conocidos como spammers, tienen
como objetivo principal capturar una inmensa lista de direcciones objetivo, para lo cual
utilizan diversas técnicas, generalmente a través programas automáticos que recorren
Internet en busca de direcciones. Una vez que tienen una gran cantidad de direcciones
verificadas los spammers pueden vender sus servicios a las empresas publicitarias.
Las implicaciones de este tipo de hábito forman parte de las nuevas consideraciones que
legalmente deben hacerse con el uso de Internet. El spam ya está prohibido en España y
Estados Unidos, a pesar de que se estima que un número considerable de los spam que
circulan en el mundo proceden de este último país. Siendo aún muy reciente, hasta
ahora pocos apuestan por la efectividad de estas leyes.
No todas las personas reciben el mismo número de spam en su correo. Una buena forma
de evitar la recepción de spam en nuestros buzones electrónicos es reducir la exposición
de la dirección personal de correo electrónico en páginas de Internet, no dejar la clave
de correo registrada en equipos utilizados por varias personas, y reeditar los mensajes
en cadena, eliminando todas las direcciones de correo electrónico anteriores, en caso de
querer hacer reenvíos de sus contenidos.
La versión de este texto para radio es transmitida por ULA FM
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